Si bien las suculentas están aumentando en popularidad, muchas personas aún desconocen estas increíbles plantas. Con suerte, esto te dará una mejor comprensión de lo que son las suculentas.

Las suculentas son un grupo de plantas que almacenan agua en sus hojas. Las hojas tienden a ser gruesas y carnosas, pero algunos géneros y especies tienen hojas más gruesas que otras. Las suculentas tienden a prosperar en climas secos y no les gusta mucha humedad.
Como con cualquier otra planta, el riego adecuado asegurará el mejor crecimiento y floración. Si bien necesitan agua para sobrevivir, pueden soportar períodos prolongados de sequía, dependiendo del agua y los nutrientes almacenados en sus hojas. Si sus raíces permanecen en el agua durante demasiado tiempo, comenzarán a pudrirse y morir.
La mayoría de las suculentas prefieren temperaturas cálidas y no pueden soportar la congelación. Debido al agua almacenada en sus hojas, la congelación a menudo provocará la muerte de la planta o la formación de hojas blandas. Algunas especies de sedums y sempervivums son capaces de soportar temperaturas bajo cero, aunque todavía les va mejor en temperaturas más cálidas.

Las temperaturas extremas, así como la falta de agua o luz solar, a menudo pueden provocar un cambio de color en las suculentas. Las suculentas tienden a «sonrojarse» o cambiar de color cuando reciben un golpe, como más luz solar de la que están acostumbradas. Generalmente, cuando las suculentas carecen de luz solar, estarán opacas o verdes. Cuando están completamente sonrojados, varían en color desde rosas, naranjas y morados hasta casi negros y rojos.
Una de las sorprendentes cualidades de las suculentas es su capacidad para propagarse fácilmente. Mientras que algunas especies se propagan más fácilmente que otras, muchas pueden hacer crecer nuevas plantas a partir de una hoja que se ha caído de la planta.